El restaurante me gusta mucho, pero sobretodo la comida y los postres son una delicia. Los mini-paninis son lo máximo!!!!!

Todo es de Primera Calidad, Pasas un momento agradable, relax tomando el café y el postre sin tanto miedo a un atraco. La gente que visita el lugar es agradable. La tortilla española es muy buena, Chequea que tamaño te van a dar, pues el pedazo puede ser muy pequeño por el precio que te deja un sin sabor. De resto recomiendo el lugar con los ojos cerrados. También puedes estacionar tu auto cómodamente en el estacionamiento de las cúpulas.

La variedad de Pizzas es innumerable, una explosion de sabores. Sin embargo tienes que Preguntar antes que tipo de pizzas tienen, para que no te den solo las que ellos quieran. El tiempo de "All you can ea"t, es LIMITADO!!!!. La bebida no está incluida en el precio de las pizzas, OJO con esto porque podría ser un golpe duro al bolsillo.

Es un restaurante q ha perdido la calidad y no se esmeran en mantener una buena imagen. Tanto el centro comercial El Recreo, como el restaurante estan precarios y lujubres. Solía venir a este lugar por la comida y ya mas nunca volveré despues de la experiencia tan negativa q tuvimos de parte del Mestre y ciertos mesoneros insultivos y falta de respeto cuando en varias oportunidades me quejé por lo mal cocido de la carne. Tengan cuidado a la hora de visitar este lugar, NO LO RECOMIENDO. el centro comercial se respira inseguridad y el restaurante ya no es el mismo de antes.

Es un lugar moderno de carnes fusionado con la antigüedad criolla venezolana. Las carnes son de primera. Los postres son una exquisitez

Es un lugar con clase, la comida de primera, el servicio muy bueno y lo mejor el ambiente. Súper relajado

El estilo del restaurante es andaluz. La decoracion tiene parecido a una alambra de Granada en españa. Tienen gran variedad de mariscos en arroces, fideguadas.

Ha sido una experiencia agradable en amigos. La comida muy buena, lo mejor, una amplia selección de vinos. Mas que un restaurant se siente como una casa.

Es un restaurante muy bueno para darle un gusto al paladar con aires de la peninsula iberica. Lo mejor, el arroz a la marinera. Pulpo a la gallega, camarones al ajillo. Se la pasa muy bien en familia y amigos.

El lugar es agradable, tranquilo, la comida me gustó, el ceviche no tiene tanto picante, lo esperaba mas picante. Volveria a venir .